El pasado 2 de abril tuvo lugar en la sede del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino de Madrid una manifestación en contra del proyecto de Real Decreto de creación del Catálogo Nacional de Especies Invasoras del que ya hemos hablado en entradas anteriores de este blog. La manifestación fue promovida por la asociación Equanimal en la que manifiestan que el objetivo de este Real Decreto es "promover la matanza de innumerables animales pertenecientes a determinadas especies consideradas invasoras".
Personalmente no voy a comentar nada a cerca de las proclamas de esta asociación, simplemente porque muchas de sus afirmaciones se comentan solas. He aquí algunas de ellas:
"Todo el mundo es consciente de que los seres humanos alteran el medio de una forma muchísimo más notable que cualquiera de estos animales. Sin embargo, la matanza de seres humanos con este fin jamás sería aceptada. De igual modo, nos opondríamos a exterminar a personas de otros países que ahora viven en el nuestro, o a exterminar a los seres humanos que viven en países con alta densidad de población."
"Quienes combatimos el especismo conocemos perfectamente los argumentos ecologistas a favor de la erradicación de animales “invasores”. Pero no ocurre a la inversa. Quienes defienden el especismo desconocen en la mayoría de los casos las razones para respetar a todos los animales."
"Así, nosotros sabemos, por ejemplo, que las malvasías canelas se mezclan con las malvasías cabeciblancas, y que ello hace que el número de estas últimas se reduzca. Pero defendemos que lo que importan son los individuos concretos, y que estos no pueden ser matados en masa para mantener una cierta variedad. O sabemos bien, por ejemplo, que animales como los coipús o los perros asilvestrados tienen un impacto en su medio. Pero sabemos también que cuando hay un interés humano en alterar el medio nunca se procede mediante la matanza de humanos, sino buscando otras soluciones. Jamás se toma una medida que masacre a los seres humanos. El motivo por el que estas medidas ecologistas se llevan a cabo únicamente cuando las víctimas son animales de especies distintas a la nuestra es que éstos son discriminados. Los animales no deben ser vistos como meros miembros de una especie u otra, sino como seres que sienten placer y dolor y que, al igual que nosotros, quieren disfrutar de sus vidas."
En fin, creo que teniendo en cuenta que las invasiones biológicas son la segunda causa de pérdida de biodiversidad, mal haremos si como única vía de solución ante estas especies exóticas se propone la prevención (visto lo visto no siempre funciona...) o reubicación de las mismas (no se muy bien con qué fin).
Cualquier persona con un mínimo de formación sabe el daño que producen las especies invasoras. Y no hablo de formación académica o universitaria, sino de cualquiera con un mínimo de interés por el medio natural, que haya ido limpiar una ribera con Adenex o se haya dejado caer por "Mira el Guadiana".
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